La plaga de roedores es una de las más habituales en los hogares y una de las que más nos ocupa durante los meses de otoño. Estos animales, además de ser una visita desagradable, pueden suponer un riesgo para nuestras salud ya que transmiten muchas enfermedades.
¿Sabías que las ratas siempre han sido las principales sospechosas de ser las causante de la peste negra? No directamente pero sí por ser el transporte que usaban las pulgas para aumentar su radio de acción.
Existen entre doscientas y trescientas especies pero en la Península Ibérica los roedores considerados plagas son dos: ratones y ratas.
Los roedores entran en el hogar a través de agujeros o espacios mal sellados, buscando comida o agua. Necesitan acceso a fuentes de agua constantemente, aunque solo beben de 15 a 60 ml diarios y se alimentan con cualquier cosa que encuentren.
Suponen un riesgo para nuestra salud (y la de nuestras mascotas) porque pueden transmitir infecciones y enfermedades como la salmonella y leptospirosis, entre otras, y por que son usados como “vehículo”por otros insectos como las pulgas, los ácaros, las garrapatas, etc. Además, causan daños en edificios, alimentos, mobiliario…
Cómo evitar los roedores en casa
- Mantener la higiene de nuestro hogar.
- No acumular basura ni dejar restos de comida. Recuerda: las bolsas de basura siempre bien cerradas.
- No tirar comida por el baño ni por el fregadero ya que las ratas y los ratones pueden acceder a ellos por las tuberías.
- Revisar grietas y agujeros de las paredes. Ten en cuenta que son unos animales muy ágiles, por lo que se cuelan por fisuras milimétricas.
Cómo identificar una plaga de roedores
Generalmente es más fácil detectar una plaga de roedores por los daños que provocan que por ver los roedores en sí, ya que son animales nocturnos. Estas son algunas de las señales que te pueden hacer sospechar:
- Puedes escuchar ruidos de roer en las paredes o bajo el suelo. También puedes oírlos correr en los falsos techos.
- Otra pista es encontrarte restos de excrementos oscuros en casa.
- Los roedores dejan un olor muy desagradable, parecido al del amoníaco, especialmente fuerte en zonas más cerradas.
- Quizás descubras desperfectos en casa: roen la madera y el plástico para afilar y cortar sus dientes. ¡Ojo! Pueden causar incendios al roer los cables eléctricos.
Qué hacer si tengo una plaga de roedores
Si tienes una plaga de roedores en casa ten en cuenta que, como hemos indicado, suponen un riego para tu salud y la de tu familia. Y no olvides, por otro lado, que su capacidad de reproducción es altísima. Ponte en contacto cuanto antes con una empresa de control de plagas. En Irabia te daremos un diagnóstico y te ayudaremos a librarte las ratas o los ratones en casa. ¡Contáctanos!